Los estróbilos de Humulus lupulus contienen flavonoides principios amargos, aceite esencial y taninos. El lúpulo posee
acción tranquilizante, útil en casos de ansiedad, nerviosismo y dificultad para conciliar el sueño.
Las hojas de Melissa officinalis contienen aceite esencial, derivados hidroxicinámicos, triterpenos y flavonoides. La Melisa posee acción sedante, espasmolítica y antiviral, útil en caso de trastornos del sueño de origen nervioso, tensión, inquietud e irritabilidad, así como en alteraciones funcionales gastrointestinales. Las flores de Citrus aurantium contienen flavonoides (naringina) y aceite esencial. El Naranjo Amargo se utiliza como tranquilizante suave en casos de nerviosismo y alteraciones del sueño.
Las partes aéreas de Passiflora incarnata contienen flavonoides, de los que destacan los di-C-heterósidos escaftósido e isoescaftósido, los 2”-O-glucósidos de los C-heterósidos isovitexina e isoorientina y en menor proporción isovitexina, isoorientina, vicenina-2, lucecina-2 y otros.
También hay presencia de trazas de heterósidos cianogénicos (ginocardina), aceite esencial y fitosteroles (sitosterol, estigmasterol). La Pasiflora, también conocida como Flor de la Pasión, presenta actividad ansiolítica, tranquilizante y espasmolítica, y está indicada en casos de intranquilidad nerviosa, inquietud e irritabilidad, con dificultad para conciliar el sueño.
La flor de Matricaria recutita contiene aceite esencial, compuesto básicamente por sesquiterpenos (-)-α-bisabolol
y sus óxidos A y B, óxido de bisabolona, cis- y trans-en-indicicloéter (hasta un 25%) y camazuleno (1-15%), el cual se forma a partir de la matricina (lactona sesquiterpénica) durante la destilación. Entre los flavonoides, se han identificado principalmente heterósidos de la apigenina, como la 7-glucosilapigenina, y de otras flavonas y flavonoles. Otros componentes son: polisacáridos mucilaginosos, cumarinas (umbeliferona y herniarina), ácidos fenoles y lactonas sesquiterpénicas (matricina). La Manzanilla se utiliza tradicionalmente como calmante, carminativa y espasmolítica de las vías digestivas, especialmente en espasmos gastrointestinales leves, distensión epigástrica y flatulencia.
Contiene néctar de agave, constituido por azúcares naturales no refinados, con lo cual se evitan los picos glucémicos y no produce caries.