Donde el aceite de Onagra juega mayor importancia es en el equilibrio hormonal femenino, regulando la sintomatología asociada a los desórdenes menstruales y la inflamación de senos (mastitis), según concluyen varios estudios científicos. Ello se debe a la capacidad antiinflamatoria natural de los ácidos grasos Omega-6.
Pero se conocen otras virtudes asociadas a este ingrediente, como el control del colesterol sanguíneo y de la presión arterial; la hidratación de la piel para calmar las irritaciones; o la consolidación ósea, gracias a su capacidad de favorecer la absorción de calcio y disminuir su excreción a través de la orina.