El estreñimiento es un problema muy común en los niños. Se considera que un niño padece estreñimiento cuando ha tenido menos de 3 deposiciones por semana, cuando las heces son duras, secas y de un tamaño demasiado grande o cuando es difícil para el niño tener un movimiento de vientre normal. En general no es motivo de preocupación. La causa principal es una dieta pobre en agua y fibra, o bien una dieta rica en grasas y azúcares refinados. En los bebés, el estreñimiento puede ocurrir en la transición de la leche materna a la fórmula para bebés o cuando comienzan a comer alimentos sólidos. El estrés y la ansiedad también pueden ser causa de estreñimiento en los más pequeños. Los disgustos emocionales pueden afectar el buen funcionamiento del intestino ocasionando estreñimiento y otras condiciones como la diarrea. En casos poco comunes, el estreñimiento es un síntoma de alguna patología, en este caso
es importante consultar al médico. Las pautas de prevención incluyen beber suficiente líquido, aumentar la ingesta de fibra, hacer ejercicio físico, crear un hábito regular de comidas y de ir al baño.
NEO PEQUES® Transit es una ayuda para el día a día, ya que contiene ingredientes naturales que lubrican y renuevan el tejido intestinal, y favorecen la eliminación de agua, mejorando la evacuación.
La glicerina o glicerol es un ingrediente natural que presenta propiedades laxantes a través de 3 vías: aumenta el bolo fecal, ya que absorbe agua hacia el exterior; irrita ligeramente la mucosa, aumentando el peristaltismo; y lubrica la pared intestinal, lo que facilita la evacuación.
La pulpa de tamarindo (Tamarindus indica) es rica en pectinas, azúcares simples y ácidos orgánicos, como tartárico, málico y ascórbico. También contiene aceite esencial. Tiene efecto laxante y antioxidante, debido a su contenido en ácidos orgánicos y pectina. Está indicado para el tratamiento sintomático del estreñimiento. Además, diversos estudios demuestran su utilidad como estimulante del sistema inmunológico.
El pericarpo (piel) de la manzana (Malus domestica) es rico en pectinas y tiene uso como regulador del tránsito intestinal. La pectina aumenta el volumen del bolo fecal, actuando como laxante suave. La pectina también confiere al fruto actividad demulcente (protector de las mucosas) y capacidad de controlar la colesterolemia. Tiene utilidad para el tratamiento de alteraciones gastrointestinales leves. Además, se ha evidenciado una interacción recíproca entre los componentes de la manzana y la microbiota, lo que favorece una buena salud intestinal.
La melena de león (Hericium erinaceus) es un hongo cuyo cuerpo fructífero contiene polisacáridos y ericenonas. Posee una acción regeneradora de las mucosas y por ello, favorece la renovación celular, la normalización de los procesos inflamatorios y el equilibrio intestinal.
Contiene sirope de agave, constituido por azúcares naturales no refinados, con lo cual se evitan los picos glucémicos y no produce caries.